Un sol pálido se colaba por las rendijas de la persiana el día que
tú naciste. Unos débiles rayos de sol que llegaron para iluminar el camino que
necesitábamos encontrar. Un camino por el cual te acompañaríamos a lo largo de
tu vida, guiándote para encontrar el tuyo. Llegará un día en el que lo tendrás
que recorrer sola, encontrarás caminos que no tendrán salida y deberás volver
hacia atrás, porque lo recorrido no ha servido de nada, y encontrar otros que
te lleven hacia tu destino. Te encontrarás a personas que te acompañarán en el
trayecto, unas se desviarán y otras te acompañarán hasta el final. Tu camino
podrá ser largo, corto, empinado o llano, pero lo más importante será cómo lo
recorras y todo lo que aprendas estando en él.
ALBA DÍAZ MOLERO, 1º X
No hay comentarios:
Publicar un comentario